Vigorexia, ¿una nueva adicción?

08/09/2016

LA ALEGRIA DE VIVIR

Por Omar Cervantes/ Especialista en Adicciones

Esta semana vamos a abordar un tema de mucha actualidad y que a menudo me preguntan a propósito de adicciones y tiene que ver con una palabra que parece estar de moda y que en ocasiones se usa de forma inadecuada: vigorexia.

Para el común de la gente, se piensa que vigorexia es la actividad física desmedida o “adictiva” que incluso en muchas ocasiones suele usarse como sinónimo de una virtud para señalar connotaciones positivas de una persona que es “bien vigoréxica” o que “hace mucho ejercicio”.

En términos clínicos, están en estudio dos nuevas modalidades que algunos consideran derivados de trastornos de la conducta alimentaria y que cumplen criterios diagnósticos y pueden ser consideradas patológicas: la ortorexia y la vigorexia.

En palabras simples, la ortorexia es la obsesión por la “comida sana” hasta llegar a extremos patológicos, mientras que la vigorexia es el resultado de una distorsión de la percepción física de la persona que piensa que está siempre más pequeña o delgada de lo que en realidad es y una idea fija y compulsiva por ganar músculo y verse más grande, aún en riesgo de su salud física.

En el caso de la vigorexia, frecuentemente relacionada con el uso de esteroides anabólicos y otras sustancias prohibidas en el deporte organizado, muchas de las cuales traen severos efectos secundarios en quien las utiliza, existe, tal como en el caso de las adicciones, una frontera muy pequeña que separa lo que es una actividad física y una disciplina alimenticia funcional, con el exceso que lleva a extremos patológicos y en ocasiones mortales.

Casos de muertes en físicoculturistas, jugadores de futbol americano profesional que terminaron en una silla de ruedas su carrera, son sólo algunos ejemplos de las consecuencias que tiene el llevar al organismo humano a límites extremos aún a costa de la salud y la vida, contrario a los preceptos clásicos de “mente sana en cuerpo sano”.

Igual que otros trastornos mentales con similitudes en sus manifestaciones sintomáticas, las causas que originan la ortorexia y la vigorexia son multifactoriales y, afortunadamente, existen soluciones y tratamientos terapéuticos para apoyar a la persona a recuperar su estado de bienestar integral, atendiendo las posibles consecuencias físicas y orgánicas, las dolencias emocionales y neuronales, así como el retorno a la salud conductual y cognitiva.

omarcervantesrodriguez.esp@gmail.com